Para un actor es difícil darle vida a un personaje que el público ya conoce. El Genio de la lámpara en el clásico animado Aladdin (1992) fue representado por Robin Williams. En el remake live-action que se encuentra en salas de cine este mes, Will Smith le da un giro al personaje que todos conocemos y admiramos con un guiño a sus roles más característicos.
Afiche: Aladdin, 2019.
El actor ha comentado en varias entrevistas que asumió este reto porque en una reunión con el equipo le encontró un "sabor" particular al personaje al improvisar una versión Hip-Hop del tema "A friend like me"; un toque que no hemos visto mucho en las películas de Disney.
Fotograma: Aladdin, 2019.
Cuando Robin Williams le dio vida por primera vez al personaje le dio forma de un modo tan característico que logra explotar casi todas las posibilidades del rol.
Fotograma: Aladdin, 1992.
Con un papel que ya está tan delimitado, debes cuidar no salirte del personaje y a la vez buscar un espacio para que no sea una copia. El Genio, en esta película ya tiene una distinción porque el personaje no es solamente una voz, es live-action, pero a la vez esta diferencia lo hace más difícil de interpretar.
En la versión animada, Williams tuvo más espacio para improvisar porque la forma de editar permitió hacer varias tomas y unir momentos distintos de su actuación de acuerdo a las necesidades de la escena.
Fotograma: Aladdin, 1992.
En esta versión Will Smith tuvo que hacer las escenas en tiempo real, lo que reduce las posibilidades en la edición y representa una presión adicional para el actor. Afortunadamente el reto no le quedó grande a Smith y podemos ver un Genio encantador con un toque de sabor extra y a la vez fiel al personaje establecido en los 90's.
Fotograma: Aladdin, 2019.
En la película hay momentos cómicos, espacios de improvisación, escenas dramáticas y por supuesto los clásicos momentos musicales de Disney. Will Smith logra ponerle su toque personal a cada instante sin perder la esencia del personaje. ¿Cómo lo logra?
Fotograma: Aladdin, 2019.
Mientras se hacía la película Smith descubrió que Williams añadió cualidades del personaje que había hecho como comediante stand-up e improvisó mucho con referencias de la época, revolucionando lo que puedes hacer en una película animada; esto estableció que este personaje esté desligado a la época de la ficción, lo volvió atemporal y determinó la comedia del personaje.
Fotograma: Aladdin, 1992.
Will Smith aprovecha esta cualidad atemporal y le añade al rol características de varios personajes que interpretó de 1990 a 1997, incluyendo "Fresh Prince", y "Agent Jay" de Men in Black (1997). Así, el actor construye este rol a partir de la experiencia de su carrera.
Imágenes: Will Smith en Fresh prince of Bel-Air, 1990 y como "Agent Jay" en Men in Black, 1997.
Fotograma: Aladdin, 2019.
En Incine el aprendizaje se basa en la experiencia. Los personajes que construyas desde el inicio de tu formación y las características que explores en cada género, pueden servir de base para el resto de tu carrera.
Para más información de la carrera de actuación visita: www.incine.edu.ec/direccion-y-actuacion Will Smith no es lo único grandioso de esta producción. La princesa Jazmine también tiene un giro en su motivación, lo que hace más atractivo al personaje, los efectos CGI logran su cometido al rodearnos de magia y en esta nueva versión de Agrabah, la selección del casting y su diversidad étnica le da un nuevo nivel al contexto de la película.
Afiche Aladdin, 2019.
Este es el segundo remake de un clásico de Disney este año, el más esperado de todos está por llegar. Mira el trailer oficial de The Lion King (2019) https://youtu.be/7TavVZMewpY